Derechos de autor: Plagio

La RAE define el plagio como la acción de “copiar en lo sustancial obras ajenas, dándolas como propias”.

En ocasiones, en el ámbito académico, tenemos dudas a la hora de discriminar lo que no es plagio en las creaciones artísticas, literarias y científicas.

Pero hay situaciones en las que podemos determinar con exactitud qué no es plagio, como, por ejemplo:

• Plasmar en una obra una idea propia original, no es plagio.
• Tampoco es plagio el conocimiento universal, comúnmente conocido por todos y de dominio público, a partir del cual se pueden crear diversas obras. 

El desconocimiento nos lleva, en ocasiones, a cometer plagio involuntario. La recomendación, si tenemos dudas y queremos evitar el riesgo de plagio, es reconocer la autoría citando al/los autor/es y a la fuente original, para evitar así atribuir erróneamente la autoría sobre los contenidos. Esta situación puede darse, por ejemplo, cuando buscamos información en internet y creemos, erróneamente, que no tiene un autor reconocido.

 Para obtener más información acerca de la autoría de los contenidos te recomendamos que consultes nuestras guías sobre Propiedad intelectual y Licencias de publicación en abierto.

Para evitar y prevenir el fraude académico el mercado pone a nuestra disposición herramientas que detectan cuando hay coincidencias dentro de un texto, para poder subsanarlas insertando la cita si no estuviera incluida.  El uso de los programas antiplagio está muy extendido en el entorno académico por lo que es difícil escapar a su control.

La Universidad Rey Juan Carlos ofrece la herramienta Turnitin. Toda la información sobre su funcionamiento la tienes disponible en este enlace.

El plagio se evita respetando los derechos de autor y citando al autor/fuente. Cada área de conocimiento tiene su propio sistema de citación. Cuando publicamos en una revista científica el editor puede imponer su propio sistema de citación, como de hecho sucede en muchas revistas. Por ello, hay que revisar siempre sus normas de publicación.

 A continuación, te mostramos una relación de los estilos más conocidos que, a su vez, incluyen numerosas variantes:

• ACS
• AMS
• APA
• CHICAGO
• IEEE
• UNE-ISO 690:2013
• MLA
• VANCOUVER
• HARVARD
• MHRA

Si vas a preparar el TFG, TFM o la Tesis Doctoral infórmate antes sobre qué estilo debes emplear. En ocasiones, el estilo ya te vendrá indicado en las normas acordadas por la propia Universidad.

Si no es así o tienes dudas, pregunta al tutor/director.

Para facilitar la tarea de citación existen unas herramientas llamadas gestores bibliográficos. Zotero y Mendeley (en la versión básica) son gratuitos y puedes descargarlos de Internet. En cambio, EndNote y Refworks son gestores que requieren subscripción, por tanto, no son gratuitos. La biblioteca, a través de su página web, pone a tu disposición el gestor Refworks que incluye los formatos más conocidos, citados anteriormente, y otros formatos propuestos por las editoriales, hasta llegar a más de 6.600 diferentes. Si quieres más información consulta nuestra guía sobre Gestores Bibliográficos.